Pero vamos a ver, ¿quién no querría ponerse al volante de KITT? Pues aquí tienes la experiencia más cercana posible a esa realidad. No olvides enfundarte los vaqueros apretados y peintarte los rizos.
Toda aventura tiene un comienzo.

Pero vamos a ver, ¿quién no querría ponerse al volante de KITT? Pues aquí tienes la experiencia más cercana posible a esa realidad. No olvides enfundarte los vaqueros apretados y peintarte los rizos.